Cuando se trata de espiar WhatsApp, muchas son las alternativas que la creatividad puede generar. Desde los métodos más exigentes hasta las técnicas más fáciles, así de amplias son las posibilidades de quienes desean aprovecharse de la información personal de alguna víctima.
Una de las estrategias más efectivas es el robo de cuentas. Así como en otros casos, cuando se intenta espiar WhatsApp, también existen métodos manuales, que no ofrecen resultados automatizados, sino que requieren del ingenio y habilidades del espía para poder lograr su objetivo.
El robo de cuentas consiste en apoderarse de los datos de ingreso de la víctima a la plataforma. Quienes actúan de esta manera, intentan activar la aplicación con el número de una persona, pero desde un móvil que no es el suyo. ¿Cómo ocurre esto? Existen varias formas en las que puede llevarse a cabo dicha técnica.
Para tener éxito, no solo necesita conocer el número del móvil de la persona, además debes estar cerca de ella y robar el código de comprobación de identidad que la aplicación envía al móvil mediante un SMS o llamada.
Tal vez estés pensando que es muy difícil obtener dicho código, pero lo cierto es, que actualmente se han desarrollado diversas formas de conseguirlo. La mayoría de ellas es mediante el descuido de la persona, que resulta siendo víctima de la audacia de un hacker que generalmente es alguien de su confianza. También puede producirse de manera remota a través de estrategias de ingeniería social.
Si quieres estar atento y prevenir dichos ataques, lo primero que debes evitar es que otras personas tengan acceso a tu móvil. Como se acaba de señalar, muchos de ellos provienen de amigos o familiares. Del mismo modo, ignora cualquier mensaje en el que se te notifique que requieren un código que te llegará en un SMS. Si cumples con estas recomendaciones, lograrás vitar los intentos por apoderarse de tu información.
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